La flor de la vida
LA FLOR DE LA VIDA llegó a mi vida hace ya muchos años y se quedó conmigo para siempre.
Durante un tiempo la investigué y leí libros y textos sobre geometría sagrada y esta forma concreta compuesta por círculos superpuestos y espaciados uniformemente.
Se dice que sus proporciones, son las que la Fuente – Dios (o como quieras llamarlo) utilizó en la creación de todo lo que existe.
Tú y yo, como seres humanos, somos creaciones del universo y nuestro subconsciente la mantiene integrada en nuestra parte más primigenia por lo que, después de tenerla muy presente en tu día a día y meditar con ella, nos ayuda a recordar de donde venimos y que somos seres sagrados. Por eso tengo flores de la vida en mi taller y en mi casa en lugares donde se ve nada más entrar. Así mismo, también integro partes o la totalidad del patrón de la vida en algunas de mis joyas. Para de esta manera, tener muy presente sus proporciones en todo momento.
Hay flores de la vida dibujadas en manuscritos, templos y arte en todas las culturas del mundo y de todas las épocas por lo que lleva presente en la humanidad desde el principio de los tiempos. ¿Podría ser un tipo de Registro Akáshico de información básica de todos los seres vivos y a la vez, ser la expresión visual de las conexiones de la vida que se ejecutan a través de todos los seres? ¿Podría contener entre sus formas y proporciones un antiguo valor espiritual y de consciencia que representa las formas fundamentales del espacio y el tiempo?
No lo sé… Lo único que puedo decirte, es que me fascina, me atrae y siento paz perdiéndome en sus proporciones.