La semilla de la vida
La Semilla de la Vida ha estado muy presente en mi vida; incluso la llevo tatuada en un antebrazo.
Es el principio de la vida y del universo. Su forma nace del círculo, símbolo de los ciclos en geometría sagrada. Los siete círculos de la Semilla representan los siete días de la creación y reflejan cómo todo está interconectado, cada etapa apoyándose en la anterior.
Si seguimos expandiendo sus círculos, la Semilla crece y se convierte en la Flor de la Vida, símbolo de la expansión continua del universo. Una capa da lugar a la siguiente, recordándonos que todo en la creación se construye de forma ordenada y armónica.
Para mí, la Semilla nos recuerda que todas las posibilidades viven en nuestro interior, y que las cadenas que sentimos son solo mentales: somos libres para elegir nuestro camino.
Tengo varios formatos de joyas con la Semilla de la Vida. Si deseas una joya que te recuerde tu infinitud y tu poder de elección, escríbeme. Juntas elegiremos un mineral que vibre contigo y crearemos una joya que acompañe tu viaje hacia ti misma.






